26 oct 2011

Consiste en leer entre líneas y ver más allá de los titulares, pero nada, esta sociedad superficial ha hecho q la gente se quede en las dos primeras líneas y opine…

24 oct 2011

La relevancia de las palabras

En mi segundo año de erasmus no me dejaba ver igual. Mis salidas x los bares grenobleses eran muchas menos y mis relaciones más selectas. Un día terminé con el "clan malin" de fiesta por el "vieux manoir" y ya nos disponíamos hacia la salida cuando conocí a la nueva camada de buitres españoles. Mis amigas todas francesas y hablando en francés iban delante sin hacer caso a lo q estos bociferaban. Al pasar yo, no se percataron del moreno de mi piel y me dirigieron su mejor sonrisa y un "Jai priti" y mirándose entre ellos escuché "q te arrancaba la ropa y te comía to..." Hola! Les dediqué un saludo antes de escuchar a López de Vegasicilia terminar su poema. Tenéis un repertorio muy trabajado por lo que veo. Y ahí nació otra de esas amistades de copas. Cada vez q nos veíamos x los bares un chinchin, unas risas y nuestro saludo "jai priti - jai jansom" Ese pretty me sonaba a mofa, a diversión, a ligoteo, era una palabra divertida. Últimamente tengo la suerte de leer y en ocasiones escuchar de una manera menos jocosa y mucho más dulce un "hi beautiful" y suena gordo. Suena muy grande, suena a tesoro, suena a miedo a que me guste, suena a ganas de que me abrace, suena a suspirar, a soñar, a volar, a aterrizar y a que te lo vuelvan a llamar de nuevo en terreno internacional. Y es que las palabras significan cosas distintas para cada un, generan emociones diversas, sentimientos intensos... pero en el fondo son engaños. Porque al igual que mi compañero de mofas me llamaba "priti" nunca me llamó guapa. No es lo mismo hablar, decir y sentir en una lengua que no es la tuya. Se llama materna por algo, porque es la que transmite sensaciones, palpita tu corazón y eriza tus cabellos. Porque fue mucho más difícil decir te quiero que Je t'aime y me falta razón para decir i love you...

"Los camareros de Madrid"

Hay mucha gente trabajando detrás de la barra de un bar. Sin embargo, pocos quedan de los que podemos llamar "Camareros de Madrid". Están en los mejores establecimientos. Ojo, no en aquellos más glamurosos, caros o mejor situados. No, están en tascas y bares de siempre, esos lugares q denominados TIPICO ESPAÑOL. Entras por la puerta y te intuyen. "Buenos días" gritan cuando pasas el umbral, mientras tú te quitas las gafas y ellos sin levantar la cabeza continúan secando vasos. No te conocen por lo que no te hacen mucho, bueno, ni puñetero caso. Cuando uno de ellos pasa por delante de ti le dices con voz tímida "cuando pueda un té con leche" y es q un camarero de un bar típico impone más respeto que el banquero de traje al que vas a pedirle una hipoteca. Camarero de Madrid, un oficio que se ha ganado ese respeto, por descontao. Se acerca el más mayor: - Ha pedido un café con leche? - No, desearía un té con leche - y esa voz se escapa por la solapa de tú chaqueta, casi no te has oído tú y aceptarías el café sin rechistar. - Lo ves, sí es que se nota, con los nervios que despide la chica como se va a tomar otro café - mientras le veo sacar de algún lado una jarrita con leche caliente que no he visto calentar, una taza con el azúcar a un lado, la cucharilla al otro y el té, pienso en como sabe que ya he desayunado! - Sí, vale tiene cara de Café y eso lo has intuído bien, pero tienes que sentir la necesidad del cliente! - Y añade con una cara imposible: Si es que no eres camarero ni na... Aquí tiene señorita. - Ni una mueca, sonrisa, levantamiento de cejas... no me merezco nada Bebo y trato de relajarme. - Cuánto le debo? - Silencio, sigue poniendo cucharillas a un lado del plato, el azúcar al otro. Creo que no me ha oído. Abro la boca - El té es.1.50 - Me ha dejado con la frase sin empezar. Me trago el aire que iba a soltar en forma de palabras y casi me atraganto. Deja claro que yo soy el cliente y bla bla bla tendrás la razón, pero los tiempos los marca él. Saco el dinero del monedero, lo dejo en la barra y al sonido dice de la moneda le acompaña un "Gracias". Me levanto y antes de salir por la puerta me giro. Ni rastro de mi presencia, el dinero en la caja, la taza y resto de jarritas supongo que ya están en el lavaplatos. Y él sigue montando tazas de desayuno. Sonrío y aunque no me ha mirado sé que me ha visto. Me pongo las gafas y al girarme escucho: - "Hasta la próxima" - Y sé que ha anotado café si dormida, té sí nerviosa... en algún lugar de su inmensa memoria.

13 oct 2011

Por encima de Tc

Tú lo publicas en una fecha y algo me hace esperar para leerlo en el momento adecuado, hoy me siento así... hoy siento tus sentimientos, hoy extraño tanto, hoy extraño a tantos que me cuesta sonreír. «Ojalá estuvieses más cerca para abrazarme mientras duermo. ojalá estuviese más cerca para abrazarte mientras duermes» - http://porencimadetc.blogspot.com/